Unos años atrás las tecnologías de la industria 4.0 parecían muy futuristas y fuera del alcance de las empresas de países en desarrollo, sin embargo, con el surgimiento de la pandemia del covid-19 se convirtieron en una necesidad.
La energía inteligente se basa en tecnologías de Internet de las cosas (IoT), para abordar los desafíos que las personas y las empresas en todo el mundo enfrentan.